¿Paz con los Thargoides?

El auge del movimiento por la xenopaz ha hecho que una serie de figuras públicas reflexionen sobre la coexistencia pacífica con la raza Thargoide.
Los llamamientos a la diplomacia intentan seguir el ritmo de las opciones militares que se están planteando en las capitales políticas de las tres superpotencias. El profesor Shamus Madigan, director de xenología en la Olympus Village University, es una de las muchas figuras que han opinado sobre el asunto:
«Los registros antiguos de los Guardianes descifrados por Ram Tah indican que aprendieron nociones de la lengua Thargoide para realizar acercamientos pacíficos. Tales intentos fueron rechazados en favor de una guerra total. Aunque han pasado millones de años, parece improbable que los Thargoides vean a la humanidad de forma diferente, sobre todo porque hemos desplegado contra ellos armamento basado en la tecnología de los Guardianes».
El gobernador federal Dalton Chase:
«Asumiendo que lográramos romper la barrera de la comunicación, no sé por qué no podríamos mantener una relación no violenta con estos seres obviamente inteligentes. La meganave a favor de la paz consignada recientemente contribuirá a demostrar a los Thargoides que no somos una raza beligerante y de mente única, sino una civilización avanzada y amiga».
Jaya Chaudhary, presentadora de la histórica emisión de ICE «Pasados horrendos»:
«La diplomacia entre humanos y Thargoides podría haber sido posible cuando nuestras dos especies se encontraron por primera vez. Pero, desde entonces, hemos hecho dos intentos por erradicarlos: primero con el compuesto micoide y, después, con la superarma Proteus Wave. Seamos sinceros: ¿nosotros querríamos hablar con una raza alienígena que nos hubiera hecho lo mismo?».
La embajadora Jasmina Halsey, expresidenta de la Federación:
«Hemos descubierto un poco sobre la historia, el comportamiento y las tecnologías de los Thargoides. Sin embargo, sus procesos de pensamiento y razonamiento podrían ser totalmente distintos a los nuestros. Desconozco si comprenden qué es la diplomacia y, mucho menos, si lograríamos encontrar un terreno común. Sin embargo, sé que tenemos que intentarlo, aunque solo sea para demostrarnos a nosotros mismos que podemos hacerlo mejor».