La venida de Taranis
Conforme la señal solitaria se aproxima a espacio colonizado por los humanos, continúa la labor para establecer negociaciones pacíficas entre especies.
El doctor Elias Pope es un licenciado de la Orion University con títulos en relaciones interestelares, ciencia política y xenología. Recientemente se ha unido a la tripulación de la meganave Kingfisher para supervisar la misión diplomática del Proyecto de Defensa Thargoide. En una entrevista con Vox Galactica, el dr. Pope explicó su papel:
«Como muchos miembros de la tripulación de la Kingfisher, me ofrecí voluntario para participar en la operación. Es como si toda mi carrera hubiera conducido a esta oportunidad. Muchos de nuestros excelentes miembros comparten este sentimiento. Si hay tan solo una ínfima posibilidad de que establezcamos una conversación con los Thargoides, bueno… será algo histórico.
Luria, mi ayudante, me ha hablado de los varios nombres que los medios utilizan ahora para estas anomalías. Como científica purista, ¡está muy descontenta con ello! Han llamado Taranis a la primera de ellas. Atravesará el sistema Hyades Sector YO-Q b5-1 a enorme velocidad, así que no tendremos mucho tiempo para atraer su atención. Pero es lo que pretendemos lograr.
La meganave cuenta con un conjunto impresionante de transmisores audiovisuales, electromagnéticos e hiperespaciales que apuntarán a Taranis conforme se aproxime. Lo intentaremos todo, desde patrones de luz intermitentes hasta ráfagas de información multifrecuencia. Establecer un punto en común es crucial en toda negociación, así que hemos compuesto mensajes que imparten conceptos universalmente reconocibles tales como fórmulas matemáticas y atlas estelares. Deberían ilustrar nuestra capacidad intelectual y de razonamiento.
En el mejor de los casos, lo que sea que controle Taranis nos oirá y responderá de forma similar. Debemos al menos intentar hacer un movimiento pacífico. Aun si fracasáramos, esto significaría para la humanidad que hay muchos que están dispuestos a hacer un intento, sin importar el peligro. Deseadnos suerte».
Conforme la señal solitaria se aproxima a espacio colonizado por los humanos, continúa la labor para establecer negociaciones pacíficas entre especies.
El doctor Elias Pope es un licenciado de la Orion University con títulos en relaciones interestelares, ciencia política y xenología. Recientemente se ha unido a la tripulación de la meganave Kingfisher para supervisar la misión diplomática del Proyecto de Defensa Thargoide. En una entrevista con Vox Galactica, el dr. Pope explicó su papel:
«Como muchos miembros de la tripulación de la Kingfisher, me ofrecí voluntario para participar en la operación. Es como si toda mi carrera hubiera conducido a esta oportunidad. Muchos de nuestros excelentes miembros comparten este sentimiento. Si hay tan solo una ínfima posibilidad de que establezcamos una conversación con los Thargoides, bueno… será algo histórico.
Luria, mi ayudante, me ha hablado de los varios nombres que los medios utilizan ahora para estas anomalías. Como científica purista, ¡está muy descontenta con ello! Han llamado Taranis a la primera de ellas. Atravesará el sistema Hyades Sector YO-Q b5-1 a enorme velocidad, así que no tendremos mucho tiempo para atraer su atención. Pero es lo que pretendemos lograr.
La meganave cuenta con un conjunto impresionante de transmisores audiovisuales, electromagnéticos e hiperespaciales que apuntarán a Taranis conforme se aproxime. Lo intentaremos todo, desde patrones de luz intermitentes hasta ráfagas de información multifrecuencia. Establecer un punto en común es crucial en toda negociación, así que hemos compuesto mensajes que imparten conceptos universalmente reconocibles tales como fórmulas matemáticas y atlas estelares. Deberían ilustrar nuestra capacidad intelectual y de razonamiento.
En el mejor de los casos, lo que sea que controle Taranis nos oirá y responderá de forma similar. Debemos al menos intentar hacer un movimiento pacífico. Aun si fracasáramos, esto significaría para la humanidad que hay muchos que están dispuestos a hacer un intento, sin importar el peligro. Deseadnos suerte».
